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Cómo hacer tierra viva orgánica (jardinería 101)

Si bien la mayoría de la gente no considera que el suelo sea una entidad viva, la idea de crear un suelo vivo nos beneficia a todos. El suelo vivo es un concepto simple pero puede tener un efecto increíblemente positivo en la forma en que cultivamos las plantas. En este artículo, analizaremos los conceptos básicos de lo que es tierra viva, exploraremos por qué este tipo de tierra es tan valiosa y describiremos cómo hacer tierra viva para su propio jardín.

¿Qué es el suelo vivo?

En el sentido más simple, un suelo vivo es un suelo que contiene muchos organismos vivos en su interior. Muchos de estos organismos son tan pequeños que resultan invisibles a simple vista. Sin embargo, aunque son pequeños, estos microorganismos desempeñan un papel esencial en el apoyo al crecimiento saludable de las plantas.

El microbios que viven cerca y sobre las raíces de las plantas facilitan la transferencia de nutrientes del suelo a la planta. A cambio, la planta proporciona carbono que ayuda a sustentar los microorganismos. Sin estas pequeñas formas de vida, las plantas tendrían dificultades para absorber los nutrientes que necesitan y no podrían crecer en su máximo potencial.

Hay algunos tipos diferentes de microbios que ayudan a crear suelos vivos y saludables. Generalmente, cuantas más variedades estén presentes, más saludable será el suelo. Entre todos aquellos tipos de microbios, los más importantes caen en una de estas categorías:

  • bacterias
  • Hongos
  • actinomicetos

A pesar de ser microscópicos, estos microbios aparecen en cantidades sorprendentemente grandes en el suelo vivo. Sin embargo, surge un problema grave cuando estas formas de vida no están presentes o están presentes sólo en bajas cantidades. Muchos suelos son de mala calidad, lo que significa que tienen pocos nutrientes y pocos microbios saludables. Esta deficiencia conduce a una mala salud de las plantas.

Este problema es frecuente en las obras de construcción y tierras de cultivo. Los suelos en las obras de construcción suelen estar compactados y pueden consistir en materiales de construcción desechados en lugar de materia orgánica que contribuye a la salud del suelo y las plantas. Algunas prácticas agrícolas pueden agotar los microbios que viven en el suelo, lo que provoca un menor rendimiento de los cultivos y una posible escasez de alimentos.

Dado que las plantas sanas son esenciales para nuestro suministro de alimentos y nuestra calidad de vida en general, debemos hacer nuestro mejor esfuerzo para cultivar un suelo vivo. Para enfatizar esa importancia, exploremos algunos de los principales beneficios de cultivar plantas en suelo vivo.    

Ventajas del suelo vivo

Desde una perspectiva amplia, es fácil ver por qué a alguien le gustaría utilizar suelo vivo en lugar de la alternativa. Pero las ventajas que los suelos vivos ofrecen a un jardinero o agricultor son mucho más numerosas de lo que cabría esperar. Para ilustrar ese punto, aquí hay cinco de los principales beneficios del suelo vivo:

  • Mejor contenido de nutrientes del suelo
  • Aireación mejorada del suelo
  • Disminución de la erosión del suelo
  • Necesidad reducida de fertilización
  • Mayor longevidad del suelo

Esos resultados son deseables ya sea que usted tienda a un pequeña parcela de jardín o producir cultivos comerciales a gran escala. Ahora, aprendamos más sobre el beneficio que tendrá para usted y sus plantas aprender a hacer tierra viva.

Mejor contenido de nutrientes del suelo

El beneficio más obvio de la tierra viva es que mejora el contenido de nutrientes del suelo que rodea las raíces de las plantas. Dado que los microbios del suelo son seres vivos, necesitan una fuente de combustible para sobrevivir. Para satisfacer esa necesidad, los microbios del suelo vivo consumirán la materia orgánica del suelo. Luego, el proceso de digestión transforma esa materia en una forma que las plantas pueden absorber fácilmente.

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Algunos de los microbios viven en las raíces de una planta o cerca de ellas. Después de consumir materia orgánica, transferirán algunos de los nutrientes a la planta y recibirán carbono a cambio. Este proceso beneficia tanto a los microbios como a la planta. Con el tiempo, tanto las plantas como el suelo seguirán volviéndose más saludables. 

Aireación mejorada del suelo

Además de un fantástico contenido de nutrientes, los suelos vivos también mejoran la aireación del suelo. La aireación del suelo implica la presencia de pequeñas bolsas de aire en el suelo. Esas bolsas facilitan que el agua y el aire se muevan a través del suelo y lleguen a las raíces de las plantas, promoviendo su crecimiento.

La aireación apoya a los microbios que viven en el suelo y, a su vez, promueve la transferencia de nutrientes de los que dependen las plantas. La aireación es también el antídoto perfecto contra la compactación del suelo. Cuando se encuentra en suelo compactado, como el que se encuentra en un sitio de construcción, las raíces de las plantas luchan por moverse y expandirse. Por el contrario, el suelo vivo está bien aireado y permitirá que las raíces se muevan según lo necesiten. 

Disminución de la erosión del suelo

La erosión es otro obstáculo importante que tanto los jardineros como los agricultores deben superar. Afortunadamente, el suelo vivo es la solución perfecta a este problema. En comparación con otros suelos, los suelos vivos muestran una mayor resistencia a la erosión. Esta disminución de la erosión puede ahorrar mucho tiempo y dinero a largo plazo y es una razón más por la que los suelos vivos son tan beneficiosos.

Necesidad reducida de fertilización

El suelo vivo es el suelo más saludable que puedes utilizar. Por esa razón, tendrás mucha menos necesidad de modificar tu suelo. Dado que los microbios del suelo son tan eficaces para fomentar el crecimiento saludable de las plantas, las aplicaciones adicionales de fertilizantes se vuelven mucho menos necesarias.

Una vez que haya creado un suelo rico y vivo, podrá mejorar drásticamente Reduzca la cantidad de fertilizante que utiliza. cada año. Esto no sólo reduce el tiempo que dedicará al mantenimiento de sus plantas, sino que también será una opción económica a medida que disminuyan sus gastos en fertilizantes.

Mayor longevidad del suelo

Este beneficio final puede ser uno de los mayores argumentos a favor de un suelo vivo. Los suelos vivos permanecerán sanos y fértiles por mucho más tiempo que otros suelos. Este beneficio es especialmente relevante para los agricultores.

Algunas prácticas agrícolas exigen la rotación de cultivos. Esa rotación es una respuesta al hecho de que los cultivos tienden a agotar los nutrientes del suelo con el tiempo. Con el tiempo, los nutrientes serán tan bajos que los cultivos de la próxima temporada tendrán un rendimiento débil. Sin embargo, este no es el caso si se trabaja con suelos vivos. Cuando se cuida bien, la tierra viva tendrá una longevidad fantástica e incluso puede volverse más saludable con el tiempo. Esta característica permite a los agricultores utilizar una mayor parte de su tierra durante más tiempo.

Cómo hacer tu propia tierra viva

Crédito: Vida inspirada en el jardín a través de YouTube: haga clic en aquí para ver directamente en YouTube

Una vez establecidos los beneficios del suelo vivo, adoptaremos un enfoque más práctico para este tema. Si bien la tierra viva es útil, no puedes disfrutar de ninguno de sus beneficios si no sabes cómo crearla. Aquí hay tres pasos rápidos que lo ayudarán con el proceso.

Crear una mezcla base

El primer paso para crear un suelo vivo es hacer una mezcla base. Esta mezcla debe constar de tres ingredientes principales:

  • turba
  • Material de aireación como piedra pómez.
  • Materia orgánica como compost

Comience usando cantidades iguales de cada ingrediente. Con el tiempo, puede comenzar a modificar las proporciones de su mezcla según lo que funcione mejor en su jardín.

Agregar nutrientes

Después de hacer la mezcla base, debes agregar los principales nutrientes del suelo que necesitan las plantas. Estos son los seis nutrientes que deben estar presentes para que tus plantas prosperen:

  • Nitrógeno
  • Fósforo
  • Potasio
  • Calcio
  • Magnesio
  • Azufre

Cada uno de esos nutrientes es importante para un suelo y unas plantas saludables; haga todo lo posible para asegurarse de que cada uno de ellos esté disponible en su suelo vivo para que sus plantas lo consuman.

Garantizar la biodiversidad

La biodiversidad es una de las características más críticas del suelo vivo. Cuantos más tipos de microbios tenga su suelo, mejor será su suelo. Por esa razón, debes utilizar sólo abono de alta calidad, ya que tendrá la mayor cantidad de actividad microbiana. También puede agregar modificaciones como humus de lombriz o té de abono para aumentar la biodiversidad de su suelo vivo.

Algunos consejos más sobre suelos vivos

Ahora tienes un conocimiento firme del suelo vivo y de cómo producirlo. Pero hay algunas ideas más relacionadas con el suelo vivo que debes considerar. Aquí hay algunos consejos profesionales que le ayudará a aprovechar al máximo su suelo vivo.

Minimizar la labranza

La labranza es una práctica común para aflojar la tierra. Sin embargo, esta actividad común tiene algunas desventajas. La labranza puede alterar los microbios del suelo vivo, impidiéndoles desempeñar sus funciones esenciales. Por esa razón, es una buena idea reducir o eliminar la labranza si deseas hacer un suelo vivo.

Utilice bolsas de cultivo de tela

Si usa su tierra viva para jardinería en macetas, debe usar un bolsa de cultivo de tela en lugar de una vasija de cerámica o plástico. Las bolsas de cultivo de tela son porosas y permiten que el aire llegue al suelo. La presencia de ese aire, combinada con una buena aireación, hace que sea mucho más fácil para tus plantas obtener los nutrientes que necesitan.

Pruebe su suelo

Es importante analizar el suelo de vez en cuando. Las pruebas le brindan una comprensión clara de lo que le falta a su suelo. Con esta información, puedes modificar tu suelo en consecuencia para crear el sustrato de cultivo ideal.

Es posible que un experto realice su prueba de suelo recolectando una muestra de su suelo. Estas pruebas son completas pero pueden tardar algún tiempo en completarse. Mientras tanto, hay Algunas formas menos técnicas de probar la salud de su suelo..

La presencia de lombrices y otros insectos suele ser un signo de buena salud del suelo. Medir la rapidez con la que el agua se infiltra en el suelo es una buena forma de probar el drenaje y la aireación. Si bien son un tanto crudas, estas observaciones pueden darle una idea general de la calidad del suelo.

Utilice cultivos de cobertura

Si bien la mayoría de las personas centran su atención únicamente en sus plantas, un agricultor inteligente también priorizará la salud del suelo. Una de las mejores maneras de hacer esto es usando cultivos de cobertura. Cuando no se cultiva un cultivo comercial en una parcela agrícola, puede resultar tentador dejar esa zona vacía. Sin embargo, es mucho mejor plantar un cultivo de cobertura.

Los cultivos de cobertura continuarán el intercambio de nutrientes y carbono entre los microbios del suelo y las raíces de las plantas. La continuación de ese intercambio hace que los microbios del suelo continúen viviendo y multiplicándose incluso cuando sus cultivos primarios crezcan en otro campo.

Juega el juego largo

Cuando trabaje con suelos vivos, recuerde tener paciencia. Puede llevar varios años cultivar suelo vivo, especialmente cuando se comienza con un suelo pobre. Los resultados de tus esfuerzos no serán inmediatos, pero si eres constante, eventualmente crearás un suelo vivo que encantará a tus plantas. Los resultados valdrán la espera.

Fuentes:

¿Por qué son importantes los microbios del suelo?

El suelo es una forma de vida, pero ¿qué es un suelo vivo?

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7 cosas importantes al construir un suelo vivo

Suelo Vivo – ¿Qué es?

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